Ventajas y desventajas del tipo de interés negativo

Ventajas y desventajas del tipo de interés negativo

Los tipos de interés negativos son una medida que toman los Bancos Centrales en momentos de crisis, con la intención de conseguir que el dinero circule y fluya. 

Pese a que no estamos demasiado acostumbrados a escuchar que los tipos de interés están en negativo, en los últimos años hemos podido oír en los medios de comunicación sus efectos y, además, nos hemos beneficiado, consciente o inconscientemente, de su aplicación.

Y es que los tipos de interés negativos suelen ser el recurso más utilizados por los Bancos Centrales para estimular la economía y conseguir que los préstamos y créditos que se ponen a disposición del cliente sean más económicos. Además, cuando se fijan los tipos de depósito en negativo, los Bancos Centrales no pagan ningún tipo de rentabilidad por el dinero que los bancos dejen depositados en sus arcas, lo que fomenta que los bancos quieran mover su dinero y empiecen a conceder préstamos, créditos e hipotecas, reactivando así la economía.

¿En qué consisten los tipos de interés negativos?

Los tipos de interés negativo son, básicamente, la forma que tienen los Bancos Centrales para hacer que el dinero se mueva y pueda llegar a los particulares, activando así la economía.

Para ello, podría decirse, que el Banco Central paga a los bancos privados porque estos le presten dinero, a su vez, a sus clientes. Es decir, por ejemplo, un banco privado le pide al Banco Central un préstamo de 50.000 euros, al estar los tipos de interés en negativo, pongamos que tenga que devolver el -0’15%, por lo tanto, el banco privado que solicitó el préstamo al Banco Central deberá devolverle, finalmente, los 50.000 euros menos el 0’15%.

Ventajas de tipo de interés negativo

Como hemos dicho, la principal ventaja es que el dinero está en movimiento, la economía circula, los particulares vuelven a poder solicitar préstamos y se facilita que los países puedan salir de las crisis en las que se encuentran.

Otra de las ventajas es que el Euribor se ve afectado por los tipos de interés negativos, por lo que, en cierto modo, se abaratan las hipotecas que estén referenciadas con este índice.

Como el dinero que se cobra, estando los tipos de interés en negativo, con los depósitos de ahorro, es casi inexistente, las personas que disponen de ahorros prefieren invertir su dinero buscando una mayor rentabilidad, por lo que se facilita la creación de nuevos negocios, por ejemplo.

Desventajas de tipo de interés negativo 

Aunque parezca que es mejor que los tipos de interés estén en negativo, también tiene sus partes negativas.

Como hemos dicho, por ejemplo, las hipotecas y los préstamos y créditos referenciados por el Euribor deberían bajar para que el acceso a los clientes fuera más sencillo, no obstante, algunos bancos privados deciden conceder préstamos, por lo que los Bancos Centrales se ven obligados a multarlos. El motivo por el que los bancos privados no quieren prestar todo el dinero que deberían, es que se exponen a asumir un alto riesgo de morosidad que, a la larga, puede acabar por influir en sus balances.

Otra desventaja, es que algunas entidades aprovechan la bajada de los tipos de interés para aumentar las comisiones y gastos asociados a sus préstamos, por lo que, finalmente, los clientes acaban pagando la misma cantidad que si los tipos de interés estuvieran en positivo.

Como hemos dicho antes, el recurso de poner los tipos de interés en negativo, es para cubrir una situación de crisis, por lo que las consecuencias pueden resultar ser una debilidad económica y una inflación.

Aunque los tipos de interés negativo tengan sus desventajas, también tienen su parte positiva que, finalmente, compensa mucho más, ya que facilita que toda la economía de los países afectados fluya de mejor manera y la recuperación económica sea más fácil de conseguir.